Muchos compañeros tenéis esta gran duda, yo también la tenía en mis comienzos. ¿Por qué no tengo éxito como fotógrafo?. La respuesta a esta pregunta está mucho más cerca de lo que te imaginas. Está dentro de ti.
En nuestro pueblo hay miles de fotógrafos y miles de aficionados. Hay muchas familias que con el avance de las reces sociales y todo lo que conlleva la conectividad se ha adentrado un poco como su pequeña, gran pasión en la fotografía creando recuerdos muy bonitos para su familia. Esto nos da un plus y nos resta otro tanto. Tenemos mucha más personas y ojos mirando a miles de fotografías que llaman la atención en un montón de lugares. ¿Pero cómo destaco?.
Hay que mirar dentro de nuestros corazones.
Las sesiones que realizamos es un reflejo de nuestro interior. De nosotros mismos. Somos lo que damos y ofrecemos y a veces comentemos el error de dejarnos influir por lo que dan otros. Jamás podrás dar lo mismo, por que no eres tú. Cada uno tiene en su interior, una esencia, un estilo y sobre todo unos gustos. Desprendemos lo que somos, lo que damos y lo que ofrecemos. Tus fotos es el reflejo de tu vida.
Hoy os dejo en vuestro email del club privado de fotógrafos esas pautas que te hacen salir de ese rol. Si no perteneces a él – > inscríbete aquí <- .
Un trabajo bien realizado, trae clientes. Hace que la voz en vez de hablar grite. Crea un camino, camina a pasos agigantados y sobre todo avanza. Un estilo bien marcado, hace que consigas clientes de tu estilo. Cuando adoptamos el estilo de otro compañero, hacemos que nuestro lobo esté disfrazado de Caperucita, jamás será ella. Pero intentará serlo, aunque a través de su caperuza le vemos las orejas de lobo y la verdad no da confianza. ¿No crees?.
Muestra tu trabajo y muestras a ti.
Tal como eres.